El dormidero está en un bosque de cipreses de Lawson que tienen las copas muy cerradas y los protegen del frío. 
Antes de las cinco de la tarde ya empezaron a llegar aficionados y curiosos.
Un poco más tarde empezaron a llegar los pinzones, al principio en bando pequeños...
...y enseguida en bandos enormes sin parar.
...y enseguida en bandos enormes sin parar.
Los pinzones reales (Fringilla montifringilla) crían en Laponia y Siberia, en los últimos bosques de abedules de la taiga, antes de la tundra.
En invierno bajan hasta Francia, donde se reunen en bandos de millones para dormir.
El año pasado había uno cerca de Po donde fueron a verlos muchos aficionados españoles.
El año pasado había uno cerca de Po donde fueron a verlos muchos aficionados españoles.
Este año han llegado hasta aquí.
Llega un momento en que todo el cielo se cubre de bandos entrecruzados que pasan rozando nuestras cabezas.
El espectáculo merece la pena.
Llega un momento en que todo el cielo se cubre de bandos entrecruzados que pasan rozando nuestras cabezas.
El espectáculo merece la pena.
Cuando se les saca una foto muchos salen con las alas plegadas, típico de algunas especias de aves que vuelan "a saltos"
Va llegando la noche y sólo se oye una gran algarabía cuyo sonido es tan fuerte que cuesta creer que proviene de pájaros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario